Cómo afrontar los nervios previos a la boda

El día de la boda es, por lo general, el día más importante de toda pareja. Sin embargo, darse el “sí, quiero” trae consigo un esfuerzo de muchos meses de preparativos y sobre todo duro esfuerzo, nervios y alguna que otra pelea pre matrimonial.

Para evitar los nervios de última hora es necesario preparar la boda con mucha antelación. Una de las primeras cosas que los futuros esposos deben hacer es buscar una casa que se convertirá en el nido de amor una vez que hayan pasado por el altar. Pero igualmente tienen que anticiparse a cualquier imprevisto que pueda afectar a su estado de ánimo: nervios, estrés, las prisas…etc. Un cúmulo de situaciones puede provocar que el día más feliz se convierta en una auténtica pesadilla.

Por ello, toma nota de algunos consejos para evitar el estrés de cara a los preparativos de tu enlace:

• Prepara una agenda. Antes de comenzar a realizar cualquier preparativo es necesario que lleves a cabo un timing para no olvidar nada y evitar nervios innecesarios. Anota dónde y cuándo debes comprar cada uno de los detalles para la boda desde encontrar una floristería en tu zona con los clasificados locales hasta la organización delas mesas con todos los invitados. Si consigues organizar una cosa para cada día evitarás los agobios que se producen en la recta final antes de contraer matrimonio.
• Acude a profesionales. Ahora más que nunca se ha puesto muy de moda recurrir a los “wedding planner”, auténticos asesores de cara al enlace que sabrán poner calmar a esos meses de sprint final antes de la boda. Y es que con su ayuda puedes conseguir quitarte de encima muchas preocupaciones y ceder algunas de las responsabilidades a los profesionales en la materia.
  
  
• Buena comunicación de pareja. Si algo no hay que descuidar durante los meses previos es la buena relación con tu futuro marido o esposa. Para comenzar a planificar el evento es necesario que se pongan de acuerdo en lo fundamental, los asistentes al enlace, el viaje de luna de miel, el fotógrafo o incluso el menú… etc. También tendrás que saber frenar el ímpetu de la familia a la hora de opinar sobre los preparativos. Pongan límites a las exigencias de sus padres pero siempre de una manera amistosa, ¡fuera las discusiones!
• Habla con otras parejas. Siempre es conveniente compartir tus nervios con tus amigos y con otras parejas que hayan pasado por lo mismo. Los consejos de otros matrimonios pueden ser muy útiles y te ahorrarán agobios ante lo desconocido. ¡Siempre es bueno conocer otras experiencias!
• No lo pagues con tu pareja. Los nervios y tu mal humor no los puedes descargar sobre tu pareja. Lo mejor para combatir el estrés es hacer deporte. Sal a correr al menos un par de veces por semana y libera toda la adrenalina que tienes contenida en tu interior.
• No hagas de tu boda un mono tema. No puedes estar continuamente hablando de la boda mientras tomas un café con tus amigas o amigos. Lo mejor es intentar evadir el tema lo máximo posible y así no te cansarás tú ni cansarás al resto.